miércoles, marzo 24, 2004

Parábola mesiánica ( Cristal 4 - Rosario Central 1)

Dibujando una parábola sobre el cielo, la pelota inició su trayectoria triunfalista desde aquel plateado e inspirado botín. Todo el estadio vio su limpia y misilezca trayectoria hasta las redes de la gloria.

Mientras la pelota hacía su trayectoria cortando el viento, sin más, el asunto se hizo lento. De pronto, todo se paralizó. Todo menos nosotros. O quizá sólo nuestras conciencias, porque nunca nos movimos. Pero pasaron muchas cosas por nuestras cabezas.

Una de ellas, era una visión futurista: en la mañana siguiente, me vi parado en el puesto de periódicos leyendo una y otra vez los titulares sobre la brillante victoria. Y en interiores, me imaginaba porsupuesto un capítulo aparte para el mejor gol de la Copa Libertadores que tuve el lujo de ver cerquita, muy cerquita. Orondo y vanidoso vería pasar a los gones y las llinas con la cabeza gacha, mirando al suelo y masticando su envidia.

Otra de ellas era más inmediata: me dije que si la pelota seguía cortando el viento y girando sobre su eje de esa forma, era muy probable que acabe incrustándose en el arco de Rosario. Entonces sería un golazo fuera de serie, casi casi de otro planeta. Entonces cuando se hace un gol fuera de serie y casi sobrenatural, uno no puede evitar ver una figura mesiánica. Ese gol trae algo más que un punto en el score. Es señal de algo bueno. ¿Recuerdan cuando una estrella iluminada dibujó una parábola sobre el cielo anunciando la Buena Nueva para el mundo? Esta vez no fue una estrella iluminada, sino una pelota iluminada. Esperemos que también traiga buenas noticias. Sin dudas, la parábola de anoche, nos da motivos para seguir creyendo y apretando los dientes.

De pronto, todo volvió a la normalidad. La pelota completo su recorrido y fue un golazo tal y como lo había pensado fracciones de segundo antes. el estadio explotó y se volvió un loquerío. El pueblo estaba feliz. Se cumplió lo predicho. Es una profecía! Ahora estoy ronco y sólo doy testimonio de lo que ya está escrito.