lunes, enero 03, 2005

ayayayay HUMALA

La cultura del caudillismo en el Perú y Latinoamérica ha tenido a lo largo de la historia un saldo atroz. Personajes como Fidel Castro y la dictadura cubana es un claro ejemplo de ese idealismo de justicia social llevado a ultranza, y que termina convirtiendo las mejores intensiones en provecho exclusivo de un gran pendejo.

Un personaje como Antauro Humala, se acaba de levantar en armas en la provincia de Andahuaylas en el Perú con cerca de 100 comabtientes que se la juegan por él. Este ex militar dado de baja, es una versión parodiada, deficitaria y huchafa del dictador cubano, o de alguno de sus otros parangones caudillistas como Hugo Chávez o Lucio Gutierrez. Este sujeto, sin más mérito que sus bravuconadas, se ha erigido como el mesías peruano que ha de salvarnos de todas nuestras penurias. Un predestinado que ha venido para castigar a los malos y premiar a los buenos, un elegido que ha de imponer por la fuerza sus razones (porque tiene pues la fuerza de su verdad irrefutable).

Bien dice el huachafo Humala que en el Perú todo funciona mal. Porque hasta en eso estamos mal: hasta nuestros revolucionarios son mediocres e incapacaces. Es cierto que Fidel Castro pasará a la historia como un sátrapa terco y testarudo, pero nadie puede dudar de sus capacidades para mantenerse más de 40 años en el poder. Pero este seudo guerrillero no tiene ni la inteligencia, ni la astucia, ni la valentía de Castro; es una copia barata y limitada del viejo dictador cubano.

Es verdad que un indicio grave de que estamos mal en este país, es que un tipo tan limitado como Antauro Humala sea capaz de hacer tal revuelo y que, con un discurso miserable, haya convencido a muchos jóvenes para unirse a su causa. Me da risa, pero también me preocupa cómo ha sido posible que este sujeto se haya erigido como un justiciero social, cuando más parece un arribista acomplejado, preocupado en comprar un auto deportivo y vestir con camisas de seda para impresionar a alguna rubia oxigenada.

El caudillista iluminado que pretende reinstaurar el trueque como la única forma de comercio y que despotrica del imperialismo yanqui, usa botas Harley Davidson.

Esperemos que este seudo levantamiento no llegue a mayores. Pero ya han muerto 7 personas por la gracia y este payaso vestido de militar debe dar muchas explicaciones.