viernes, abril 28, 2006

Lee peruano lee

El lunes 24 de abril, como parte de las celebraciones por el día del idioma, se llevó a cabo el suceso llamado Escritores en el Patio, que consistió en concretar una gran charla magistral, en simultáneo, a miles de padres de familia en cien colegios por cien escritores distintos contando cómo la lectura había enriquecido sus vidas, y llevando un mismo mensaje: LEER ES LO MEJOR QUE PUEDEN HACER TODAS LAS PERSONAS PARA SER MEJORES DE LO QUE YA SON. Una brillante iniciativa gestionada por mi amigo, el escritor Javier Arévalo, quien consiguió con mucha pericia, el respaldo de la Biblioteca Nacional y el financiamiento del Banco Continental.

Está comprobado que la lectura es el mejor camino para potenciar nuestro cerebro puesto que, cuando ejercitamos la lectura, estimulamos las sinapsis cerebrales, que no es otra cosa que los intercambios de información entre las neuronas de nuestro cerebro y ocurren cada vez que lo hacemos pensar. Estos intercambios de estímulos neuronales se repiten cada vez que hacemos funcionar nuestro cerebro para resolver algún obstáculo o problema. Y como toda regla, cuando más repeticiones se hagan, más se refuerzan ese tipo de intercambios. Es el natural proceso del reforzamiento de las vías neuronales que más se repiten Por el contrario, cuando no estimulamos las sinapsis, éstas se terminan atrofiando hasta desaparecer. Un proceso denominado poda cerebral, que elimina las ‘sobrantes’ o aquellas que no se utilizan.

Entonces la receta se cae de madura: LA MEJOR MANERA DE POTENCIAR ESOS VÍNCULOS CEREBRALES PARA DESARROLLAR LA POTENCIA DE NUESTRO CEREBRO, ES LA LECTURA.

Ahora les comentaré que mi experiencia dando la charla en el colegio “Saenz Peña” no pudo ser mejor. Hubo alrededor de cincuenta personas cuando no se esperaban ni siquiera diez. La Directora del colegio me había advertido sobre la indiferencia de los padres de familia sobre éstos temas. Pero vinieron más de los esperados y con la mejor disposición. Pude comprobar su interés por asimilar el mensaje que les traía por sus preguntas y repreguntas. Se notaban entusiasmados con la idea de que sus hijos sean mejores que ellos, que su mejor contribución al mundo es que sus hijos estén preparados para afrontar con éxito el desafío de ser mejores profesionales, mejores seres humanos.

Ahora fueron cincuenta, la próxima serán muchos más, se los aseguro.

P.D.- Yo creo que un escritor siempre va a despertar interés entre las persona por el simple hecho de dedicarse a un oficio poco común, cuestionado y a la vez respetado. Al final de la charla, las personas quisieron tomarse fotos conmigo y en algún momento, una joven y atrevida madre de familia entre tanta broma y apachurramiento para la foto, no se aguantó y me tocó las nalgas con un movimiento rápido, furtivo y atrevido. Justo en ese instante escuché un murmullo chacotero y la cámara disparó la foto. Estoy seguro, amigos, que la foto de recuerdo ha quedado grabada para la posteridad con un grupo de madres de familia sonriendo pícaramente y al medio de ellas, un escritor con los ojos saltones y una expresión de sorpresa ante la ‘tocada’ inesperada.